Circulación
El sistema circulatorio o aparato cardiovascular está compuesto por una compleja red de vasos sanguíneos que se encargan de transportar oxígeno y nutrientes a cada unos de nuestros órganos y músculos. Su buen funcionamiento es vital para mantener la salud de cada uno de ellos. De lo contrario, es posible desarrollar problemas relacionados con irregularidades en el riego sanguíneo hacia las extremidades, o incluso los órganos, causando enfermedades más importantes.
Existe la creencia de que los problemas de circulación solo afectan a las personas mayores, pero nada más lejos de la verdad. Está claro que el buen funcionamiento de la circulación está íntimamente relacionado con el movimiento natural de nuestro cuerpo y el ejercicio físico, y este se reduce conforme la edad es más avanzada.
Sin embargo, en los tiempos que vivimos, parece que la tendencia va en sentido contrario: cada vez nos movemos menos. Ya sea por el trabajo, por las nuevas formas de ocio o por nuestros malos hábitos en general, se hace evidente que cada vez pasamos más y más horas sentadas frente a una pantalla. Esto no solo nos empuja hacia el sedentarismo y el sobrepeso, sino que también nos expone a los problemas que surgen por las malas posturas que adoptamos al realizar dichas actividades.
Sin embargo, sin olvidarnos de resaltar la vital importancia de incluir ese movimiento en nuestras vidas y siempre fomentando los beneficios del ejercicio físico (por mínimo que sea), podemos decir que la medicina nos brinda ciertas soluciones que nos pueden facilitar el buen funcionamiento de la circulación.
Marcas como Arkopharma o Aquilea son expertos en este campo y nos proveen de productos naturales específicos para incidir en zonas especialmente afectadas como las piernas.
Un ejemplo: Aquilea Piernas Ligeras 60 comprimidos, un complejo a base de vitamina C y hierbas de efecto vasoconstrictor y antiinflamatorio que alivia y refresca las piernas y disminuye síntomas como calambres y fatiga.
En nuestra farmacia encontrarás este y otros productos adecuados para tu caso para que logres optimizar el funcionamiento de tu circulación. Si tienes cualquier duda, no dudes en contactarnos para obtener más información ¡Estaremos encantados de atenderte!
Preguntas frecuentes que nos hacen nuestros clientes:
¿Cómo saber si tengo mala circulación?
Los principales síntomas de una mala circulación son: la sensación de hormigueo y entumecimiento en las extremidades (especialmente en las piernas), la aparición de manchas rojas, hinchazón de tobillos, grietas en los talones, varices, calambres habituales, ausencia de vello, piel seca, fría, muy pálida o azulada, entre otros.
¿Qué pastillas sirven para la circulación?
Hay distintos tipos de pastillas, pero te recomendamos los suplementos como los que encontrarás en nuestra web de la marca Arkopharma o Aquilea cuya composición se centra en productos naturales.
¿Qué provoca la mala circulación de la sangre?
Los principales factores causantes de una mala circulación son el envejecimiento, el sedentarismo, el sobrepeso y las posturas forzadas, pero también pueden ser causa algunas enfermedades crónicas o el embarazo.
¿Cuál es la mejor vitamina para la circulación?
Las vitaminas implicadas en los procesos de la buena circulación de nuestro cuerpo son las vitaminas del tipo B, la vitamina E (dada su efectividad al prevenir las enfermedades cardíacas) y la vitamina C. Tampoco hay que olvidar el beneficio que nos aportan el magnesio, el calcio y los productos ricos en ácidos Omega-3.
¿Qué es bueno para la circulación en las piernas?
Más allá de la inestimable ayuda de los suplementos, se recomienda llevar una dieta equilibrada baja en sal y rica en verduras de hoja verde oscuro (como las espinacas, por ejemplo) y en alimentos que contengan Omega-3 (pescado azul, aceite de oliva, aguacate, semillas, etc.), aumentar el consumo de agua y probar de incluir algún té diurético, también ayudará. Eso si, lo más recomendable es acompañar esos buenos hábitos alimenticios con actividad física, especialmente con aquellos ejercicios específicos que fomenten el movimiento de las piernas.
¿Qué no se debe comer cuando se tiene mala circulación?
Para mantener una buena circulación, se recomienda evitar los alimentos con un alto contenido de sodio, las grasas hidrogenadas (presentes en alimentos como las margarinas, bollería industrial, “comida rápida”, etc.), las carnes rojas y también los azúcares añadidos.